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Actualmente, millones de usuarios dependen de servicios como Gmail para su comunicación diaria. De hecho, a pesar del aumento de la mensajería instantánea, el correo electrónico sigue siendo un pilar clave tanto en nuestra vida personal como profesional. 

Aún así, dicha popularidad tiene un precio: el constante bombardeo de correos. Es habitual que nuestra bandeja se llene de newsletters y promociones a las que nos suscribimos hace tiempo y que hoy ya no nos interesan, convirtiéndose en una auténtica molestia.

Por consiguiente, ¿te gustaría dejar de recibir esos mensajes sin esfuerzo? El propio Google tiene la solución directa, y es más fácil de lo que piensas.

Cómo usar la función «Suscripción Anular» de Gmail

Si quieres olvidarte de tener que buscar el pequeño enlace de «darse de baja» al final de cada correo,  Gmail te ofrece una herramienta centralizada y visible para gestionarlo todo:

1. Accede a Gmail en su versión web.
2. En el panel lateral izquierdo, debajo de la etiqueta principal, busca y haz clic en «Gestionar suscripciones» .
3. Se abrirá una nueva ventana con un listado de los correos más recientes recibidos de tus suscripciones activas.
4. Junto a cada correo, verás un enlace que dice «Darse de baja» (o «Anular suscripción»).
5. Haga clic en él. ¡Listo! Confirma la anulación y, a partir de ese instante, dejarás de recibir correos de esa compañía de forma automática y definitiva.

¿Anular la suscripción o marcar como spam? Elige bien

La realidad es que ambas opciones te permiten dejar de ver un correo, pero su impacto es muy diferente. De hecho, elegir correctamente es clave para una gestión del correo electrónico más segura y responsable:

-Anular la suscripción: Es la vía «civilizada«. Le comunicas al remitente (la empresa o tienda) que ya no deseas recibir sus comunicaciones. Es lo adecuado para newsletters legítimas que simplemente ya no quieres.

-Marcar como spam: Esto es una denuncia directa a Google, indicando que el remitente es fraudulento o malicioso. Úsalo solo cuando el correo sea realmente spam o una estafa. 

Recuerda marcar como spam a empresas legítimas puede perjudicar su capacidad de comunicación incluso con clientes que sí desean sus correos.

En conclusión, si te suscribiste a la newsletter y ya no quieres recibirla, usa “Anular la suscripción”. Si recibes un correo sospechoso o de alguien que nunca conociste, usa Marcar como spam .

Con este sencillo truco de Gmail, recuperarás el control de tu bandeja de entrada y dirás adiós al email-bombing de las suscripciones.

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(S.M.C)